Me acabo de encontrar con la cosa esa del http://www.scribd.com/ , para subir y bajar y revolver libricos.
Qué cosas que inventan.
Y he estado jugando con uno de los 2 libros que me han regalaron alguna vez, cumpliendo las normas, por santjordis. Los 2 son muy buenos o lo fueron para mí. El "Opus Nigrum" de Yourcemar y el "El libro de Manuel". De esxs autorxs, los unicos que he leido.
Sí, ya.
Y encima, el de Cortazar se me perdió en un naufragio. No es facil de encontrar en los encantes.
Supongo que también estará flotando por el internés.
A los pdf no se como sacarles el texto, igual ni se puede.
A esta cosa del scribd, sí.
Le he recortado una paginica pa probar.
http://www.scribd.com/doc/23932927/Yourcenar-Marguerite-Opus-Nigrum
" ... el ... que se arriesgaba ... se convertía en un tránsfuga. Las mismas reglas eran valederas para el campo más escabroso de las ideas puras.
El error de Averroes, la hipótesis de una divinidad fríamente actuante en el interior de un mundo eterno, parecía arrebatarle al devoto el recurso a un Dios hecho a su imagen y semejanza y que reservaba para el hombre sus cóleras y sus bondades.
... El error de Pitágoras, que permitía atribuir a los animales un alma semejante a la nuestra en naturaleza y esencia escandalizaba aún más al bípedo implume que pone todo su empeño en ser la única criatura viva que dura eternamente.
El enunciado del error de Epicuro, es decir, la hipótesis de que la muerte es el fin de todo, aun siendo más conforme a lo que observamos en cadáveres y cementerios, hería en lo más hondo no sólo nuestra avidez por estar en este mundo, sino asimismo el orgullo que neciamente nos asegura que merecemos seguir en él.
Se suponía que todas estas opiniones ofendían a Dios; de hecho, lo que se les reprochaba sobre todo era quebrantar la importancia del hombre. Era, pues, natural que llevaran al que las propagaba a la cárcel o más lejos aún.
Y al descender de las puras ideas a los caminos tortuosos de la conducta humana, el miedo, más aún que el orgullo, se convertía en el motor primero de las abominaciones.
La osadía del filósofo que preconizaba el libre juego de los sentidos y trataba sin despreciarlos los placeres carnales exasperaba a la multitud, propensa en este campo a mucha superstición y a mucha hipocresía. Poco importaba que el hombre que a ello se arriesgaba fuera más austero y en ocasiones más casto que sus encarnizados detractores: la gente estaba de acuerdo en proclamar que no había fuego ni suplicio en el mundo capaz de hacer expiar tan atroz licencia, precisamente porque la osadía del espíritu parece agravar la del simple cuerpo.
La indiferencia del sabio para quien todo país es patria y toda religión un culto válido a su manera exasperaba también a toda aquella muchedumbre de prisioneros; si aquel filósofo renegado que, sin embargo, no renegaba de ninguna de sus creencias verdaderas, era para ellos un chivo expiatorio, esto era debido a que cada uno de ellos, algún día, secretamente, o incluso sin darse cuenta, había deseado salir del círculo en donde moriría encerrado.
El rebelde que se levanta contra su príncipe provoca en las gentes de bien la misma envidiosa furia: su No es una vejación para su incesante Sí."
http://avalanchasfavoritas.blogspot.com/2008/12/tres-pequeas-historias-de-un-taller-de.html
Bueno pues, de vicio.
Yourcenar Marguerite - Opus Nigrum
Coño, incrustar los libricos también !
Esto es peor que la tele, igual debería volver a hacerme con una, a modo de metadona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario